Recomendaciones tras la amputación de miembro inferior

 1.Posicionamiento correcto

Inmediatamente después de la operación, el paciente no podrá estar tumbado/a durante
periodos de tiempo prolongados ni darse la vuelta en la cama por su cuenta. Siendo así,
debería obtener asistencia para reposicionarse varias veces al día.

Este reposicionamiento es importante puesto que asegura que le mantendrá tan libre de dolor como sea posible y además previene la formación de úlceras por presión. Una postura corporal correcta es crucial para su movilidad.

Debe evitar una mala alineación corporal, cambiar de postura cada 45 minutos, mantener la piel hidratada con cremas o aceite, una vez al día como mínimo, colocarse boca abajo 5-10 minutos, siempre y cuando tolere la postura y asegurarse que el vendaje esté bien colocado.

 

2 Ejercicios de movimiento

Se recomienda encarecidamente realizar ejercicios para fortalecer la musculatura de
torso, brazo y piernas a fin de preparar al cuerpo para los siguientes pasos en el tratamiento.
 
Los ejercicios se pueden llevar a cabo con poco peso desde una posición tumbada, sentada o de pie. También se debe ejercitar el muñón residual. Estos ejercicios de movimiento previenen la rigidez de los músculos y articulaciones. 

3.Ejercicios de movilidad

Una vez realizados lo ejercicios de movimiento el paciente puede empezar a trabajar en su
movilidad: a levantarse de la cama por su cuenta, realizar transferencias ponerse de pie
por primera vez, restablecer el equilibrio, todo ello siguiendo las instrucciones de su terapeuta.

           

                

              

 

4.Ajuste temprano e inmediato

En algunos casos se puede ajustar una prótesis poco tiempo después de la amputación. Con una prótesis tan inmediata, se puede aplicar peso parcialmente sobre el muñón residual para iniciar un entrenamiento de marcha. El primer ajuste se suele hacer unos 10 días después de la amputación.